Laboral

La falta de personalde personal en centros privados está llevando a las enfermeras “al límite”

La responsable del sector privado de SATSE Catalunya, Elisabeth Domínguez, denuncia un “burnout” generalizado entre las profesionales del sector que trabajan a diario con una enorme sobrecarga.
Paciente junto a enfermeras en un pasillo de hospital

SATSE Catalunya ha denunciado hoy que las enfermeras del sector privado en Catalunya están sufriendo una sobrecarga asistencial importante que provoca un desgaste generalizado en los profesionales del sector. Elisabeth Domínguez, referente del sector privado en SATSE Barcelona, ha asegurado que debido a “la carga asistencial y el número de pacientes asignados, muchas enfermeras sufren ansiedad y estrés, lo que acaba derivando en un agotamiento profesional muy importante".

El problema se retro alimenta porque la dificultad de cubrir estos puestos de trabajo hace que las Direcciones denieguen descansos o libranzas del personal en activo, lo que aumenta todavía más el efecto del “burnout”.

Calidad asistencial

Las condiciones laborales en la privada provocan una exagerada movilidad de personal en el sector lo que, según Domínguez, afecta directamente a la calidad asistencial. “Los pacientes quieren una calidad, una atención, que se les expliquen las cosas y sentirse seguros. Pero al perder la referencia de su enfermera, no hay la proximidad necesaria para sentirse seguro. El personal cambia un día, el otro y el siguiente” explica la responsable de SATSE.

Por otro lado, Domínguez, asegura que las ratios de enfermera / paciente en los centros privados son “más elevados que otros” y añade que “cuando un problema es general, en nuestro sector siempre es peor”. En este sentido hace referencia a la Ley del Paciente, promovida por SATSE a través de una ILP y que busca con su aprobación poner límite al número de pacientes que se pueda asignar a cada enfermera y en cualquier centro de España. “Por mucho que una enfermera quiera hacer, al final somos personas y esto lo tienen que entender. Empezando por el Gobierno y siguiendo por las empresas” explica.

Valorar al profesional

La representante de privadas en SATSE Barcelona recuerda que “hace falta que las empresas privadas empiecen a valorar a las enfermeras y reflexionen sobre la razón por la cual las están perdiendo”. Domínguez recuerda que enfermeros y enfermeras de los centros privados “trabajamos alrededor de 200 horas más en el año que los otros Convenios”, esto implica que la mayoría acaba pidiendo reducciones de jornada para poder atender a  la familia. “Una jornada anual equiparada a la de otros convenios, contribuiría a que los y las enfermeras no tuviéramos que pedir estas reducciones para compatibilizar la vida familiar” explica Domínguez. 

Otra mejora que exige la responsable es un cambio de categoría profesional que, además de en lo económico, supondría un reconocimiento profesional. Los y las enfermeras son sanitarios con estudios de grado de 240 créditos lo que los iguala a otros que están incluidos al grupo 1 de la escala profesional y no al grupo 2, como las enfermeras. Esto supone una barrera a la hora de, por ejemplo, acceder a cargos de mando. “Una enfermera en la privada puede aspirar, como máximo, a la Dirección de Enfermería, nunca a un Gerencia” afirma.